N E O B A R R O S O

Stabbing Westward me gusta. Me gusta la voz  de Christopher Hall cuando se despliega desde lo más cómodo del canto hasta los gritos más agudos y violentos. Me gusta recordar cuando los oí en los 90’s, el 2000, hace unos días en las radios de internet. Me gusta sentir como se irradia la fuerza de las guitarras y el embalaje destrozado de la batería. Y tengo razón. La banda nacida en Chicago el ’85 tiene todo ese aire del rock industrial que le imponen los críticos, pero también la fuerza electrónica, la impronta del sintetizador. Compuesta por el ya mencionado Hall en la voz y bajo, inició con Walter Flakus en teclados y Jim Clanin en las guitarras, para luego dar paso a Chris Vrenna en la batería (baterista de Nine Inch Nails). Cambientes de integrantes, mantuvieron un estilo propio hasta la disolución del grupo el año 2002. Iniciando el ’92 con su E.P. vinilo llamado “Iwo Jimma” (de 3 temas hoy por hoy muy difíciles de hallar en la versión original), continuaron su trayecto con el disco Ungod del año 1994,  Wither Blister Burn & Peel del ‘96, Darkest Days del ‘98, el disco homónimo Stabbing Westward del 2001, The Essential Stabbing Westward (para mí el disco más íntegro) y What Do I Have to Do?, ambos al año de disolverse el grupo pero de distintas disqueras.

La presente entrega recopila lo que para mí es lo más suculento de esta banda estadounidense. Son 18 temas seleccionados de todos y cada uno de sus discos y algunos recogidos de ediciones especiales para soundtrack. El repertorio sigue así: