Vuelve ese gustito de hacer sonar otra de esas canciones del recuerdo de tus viejos, de esas bien tropicales que calan en la razón y dentro de la combi o cuando estás en el mercado y al mayoreo pides un descuento. Toda la experiencia urbana de clase media que es la que experimenta mi país a mucha honra y sin apuros. Y está bien. Porque en esos detalles como caminar en medio de la gente pensando en si te va a alcanzar el dinero también está el sentido patriótico de ver que el Perú es más grande que sus dificultades. Y su música también. Te doy la oportunidad de disfrutar de otros quince tracks muy de calle, muy de salón, muy de ají de gallina y pichanga de sábado. Papá Chacalón y Juaneco saben lo que hacen. Helos aquí:
